Pablo Llanes es fisioterapeuta y osteópata con una amplia carrera en nuestro sector. Director y docente del postgrado de Fisioterapia Deportiva de IACES y profesor de la Escuela de Osteopatía de Madrid, trabaja actualmente en su clínica Holystic y en el proyecto Holystic ProAfrica. Hoy nos habla de su experiencia como fisioterapeuta en equipos de alto rendimiento y como docente en fisioterapia deportiva.
Pablo Llanes – Estar trabajando en el Real Madrid o la Selección Española de Baloncesto es una de las experiencias más bonitas que puede tener un fisioterapeuta deportivo. Está llena de buenos momentos, pero también es muy exigente. El día a día era estar en un pabellón o en un campo de fútbol viendo entrenamientos y atendiendo a los jugadores, y siempre disponiendo de disponibilidad total con el equipo.
P.LL – Es un tema muy debatido en las clases de formación que impartimos a los fisioterapeutas nóveles que recibimos recién salidos de la Universidad. Afortunadamente cada vez hay más posibilidades para la mujeres que quieren entrar dentro de un vestuario a desempeñar su trabajo, pero pienso que todavía queda mucho camino por recorrer. Es verdad que existen algunos deportes que son más “machistas” que otros, pero ya no es raro ver a una fémina levantarse de un banquillo para atender a un jugador.
P.LL – Es algo muy común en el deporte de élite. Hay que entender que la vida de un deportista no es mucho mayor de los diez años y que si está parado puede suponer el que le parten del equipo o no renueve contrato al año siguiente. Por otro lado el entrenador está muy presionado por conseguir éxitos deportivos y también quiere exprimir al máximo a sus jugadores. Nuestro trabajo es adaptarnos a estas demandas y saber comunicar las necesidades de reposo cuando lo veamos oportuno, especialmente en las ocasiones en que forzar la aparición del jugador en el campo pueda conllevar un agravamiento de la lesión.
P.LL – En mi caso confluyeron muchos factores. Me aparté de primeros equipos por motivos personales y en ese momento me di cuenta de que mi vida profesional, en vez de menguar, creció exponencialmente: abrir mi propia clínica, impartir clases, poder disfrutar de un fin de semana con mi familia… La mayor parte de las novedades eran positivas. El hecho de estar trabajando al máximo nivel te aporta grandes experiencias, pero también te impide acceder a otras muchas oportunidades que te puede ofrecer la vida.
P.LL – Si un fisioterapeuta quiere dedicarse al ámbito deportivo que no dude en formarse en un post-grado especializado con prácticas reales en centros de referencia. No imagino otra forma de dar una atención de calidad a deportistas de diferente nivel y saberse integrar de manera eficaz en un equipo multidisciplinar de élite. Tan importante es la teoría como la práctica, y la mayor parte de formaciones tienen carencias en este aspecto. También es fundamental que los alumnos conozcan de cerca opiniones de médicos, entrenadores, preparadores físicos, prensa, directivos… que trabajan alrededor del jugador. Forman parte también del “circo” y si no sabemos como actuar junto a ellos nunca podremos formar parte de su equipo. Si tengo que priorizar alguna materia sería la de DIAGNÓSTICO y ABORDAJE TERAPÉUTICO. Si no tenemos una buena base nuestros tratamientos serán muy mediocres.
(Imagen cedida por Pablo Llanes)
P.LL– Les aconsejo amar su profesión y disfrutar cada día de tener un trabajo maravilloso, cuidar a otras personas. Llegar a la élite solo se dará si hay excelencia en su trato y, como no, si se tiene un poco de suerte y encontramos alguien que confíe en nosotros y nos lleve a la cima. Por otro lado no pienso que lleguen a lo más alto los mejores. Los equipos de élite están desgraciadamente muy influenciados por la gran cantidad de intereses económicos, políticos y mediáticos de los personajes que los dirigen. Esto último influye también en los Servicios Médicos. Y si no observe el penoso espectáculo que se está dando en los últimos años en el primer equipo de fútbol del Real Madrid, donde parece que cada año las cosas funcionan peor y peor y cada vez son más los jugadores que se tratan fuera del vestuario. Una lástima, muy lejos de la realidad que viví hace años en la que todos formábamos un verdadero grupo humano.
P.LL.- Muchas gracias por la pregunta. Vivimos en un mundo extremadamente materialista y es precioso que de vez en cuando alguien cometa la locura de querer dedicar su tiempo a los demás sin la necesidad de recibir algo a cambio. Holystic ProAfrica desarrolla proyectos de formación de sanitarios y atención a niños discapacitados en el Norte de Etiopía. La mejor manera de ayudarnos es sensibilizarse con estos niños y darse cuenta de que si queremos hacer de este un mundo mejor tenemos que movilizarnos. En los últimos años hemos crecido mucho y necesitamos apoyo económico y de recursos humanos de calidad. Fisioterapeutas especializados en pediatría que tengan un nivel de inglés básico para poder comunicar su experiencia a los sanitarios y familias que cuidan de estos niños.
(Imagen cedida por Pablo Llanes)
P.LL – Gracias a vosotros.